Las Atarazanas Reales
La réplica de la Galera Real es una de las exposiciones del museo más buscadas por los turistas
El museo
La capital de Cataluña tiene más de 50 museos, pero ninguno es como este. El Museo Marítimo de Barcelona (MMB) está especialmente dedicado a la preservación y difusión del patrimonio cultural marítimo de la comunidad autónoma española. Inaugurada en 1936, la institución pública trabaja para difundir la historia de la navegación y del comercio marítimo del país.
Su localización también representa mucha historia. Con el objetivo de construir una flota para la expansión militar y comercial de Cataluña y Aragón, surgen las Atarazanas Reales (Las Drassanes Reials, en catalán); un conjunto arquitectónico de estilo gótico que, a pesar de haber sufrido modificaciones a lo largo de los años, hoy en día mantiene dos de las cuatro torres originales construidas entre el Siglo XIII y IV.
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Utilizadas principalmente como un espacio de trabajo para la construcción de embarcaciones para la guerra, el comercio de esclavos y el uso comercial, las Atarazanas Reales también funcionaban como un lugar para el mantenimiento de los barcos, así como de herramientas y armamento. Hoy, además de abrigar el MMB, es uno de los edificios representativos del gótico civil más importantes del mundo.
Foto: Lorena Velázquez